Por Lautaro Véliz
Finalmente, tras dos meses de espera, el pasado sábado 5 de abril llegó la hora de la verdad para el “verde de Gerli”, que visitaba a Platense en Saveedra por la primera fecha del grupo B de la tercera división.
Desde temprano la gente de Gerli comenzó a poblar las gradas del estadio del “marrón” para ver jugar a las categorías más chiquitas, y cerca de las nueve de la noche, minutos antes del comienzo de la primera, ya se vivía un clima muy intenso en ambas tribunas.
Desde temprano la gente de Gerli comenzó a poblar las gradas del estadio del “marrón” para ver jugar a las categorías más chiquitas, y cerca de las nueve de la noche, minutos antes del comienzo de la primera, ya se vivía un clima muy intenso en ambas tribunas.
Tras un verdadero partizado, Villa Argentina logró imponerse en el marcador por 5 a 3 en lo que fue una victoria valiosísima que le permitió comenzar el certamen con el pie derecho ante un rival muy preparado. El equipo reflejó los cambios a nivel institucional en la cancha, y los jugadores demostraron que tienen mucho talento, y que tiran todos para el mismo lado.
El Club social y deportivo Villa Argentina
llegó al torneo de futsal AFA en el año 2008. Fue anotado en la división “B” ese año, y tras una gran campaña finalizó en
sexto lugar en la tabla de posiciones. Esta sería su mejor clasificación de
allí en más: en los años posteriores el club fue perdiendo el entusiasmo poco a
poco y no ha podido conseguir más que un décimo puesto en el año 2011.
Finalmente, en el año 2013 tocó fondo, y tras una racha de muy malos resultados
descendió a la división “C”, que comenzaría a tener vigencia en abril de 2014.
Esto generó una gran preocupación en la
comisión directiva del club, así como en sus jugadores y en su gente, estaba
claro que se necesitaba un cambio. Fue entonces cuando dirigentes y técnicos
acordaron poner todo su empeño para revertir esta situación, y conseguir el
ascenso a la segunda división.
El técnico de la primera, Adrián González comenzó a trabajar con los jugadores
en febrero, realizando una dura pretemporada que hasta incluyó la contratación
de un preparador físico, e hizo hincapié en cambiar la mentalidad del equipo.
Los jugadores se veían muy entusiasmados con el nuevo proyecto que estaba
encarando el club, y se formó un grupo muy unido. El régimen de prácticas
comenzó a ser más intenso, y a mediados de marzo el equipo ya estaba listo para
la competencia. Estaba claro cuál era el objetivo a conseguir: el ascenso.
Por otra parte, este viernes desde las 21:30 hs. en el estadio de Villa Modelo, en Gerli, el “verde” recibe a Temperley por la segunda fecha del grupo B, en busca de su segunda victoria en el torneo.
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